Estado inicial

Era un piso de unos 70 metros cuadrados de los años 60, que no había tenido ninguna renovación hasta la fecha. Carecía de instalación de calefacción, y el resto de instalaciones estaban muy deficitarias. Necesitaba una reforma integral.

Proyecto

Tras valorar distintas propuestas de distribución de espacios, con más o menos habitaciones, con cocina abierta o independiente, decidimos dotar a la vivienda con un segundo baño. Se trata de un elemento que diferencia el piso del resto de oferta inmobiliaria disponible por la zona, que en su mayoría carece de un segundo baño. Decidimos mantener la cocina en su ubicación actual y separada del salón/comedor.

Demolición

Como en toda reforma integral, el primer paso consistió en realizar una demolición total, dejando el espacio completamente diáfano. Tras ella, realizamos el obligado replanteo, y diseñamos incluso el mobiliario que nos parecía idóneo, tanto funcional como estéticamente.

Renovación de instalaciones

Una vez que estuvo completamente definida la nueva distribución, comenzamos con las instalaciones.

Para la calefacción, colocamos una caldera de dimensiones mínimas, ya que debía quedar perfectamente integrada en el mueble alto de cocina. Se plantearon los radiadores en los lugares donde mejor funcionaban y resultaban más convenientes estéticamente más convenía. Por ejemplo, y tal y como se aprecia en las fotografías, para ubicar el radiador de la habitación principal realizamos una hornacina donde lo alojamos. Una solución muy conveniente para ganar centímetros en un dormitorio con poco fondo.

En las reformas integrales es muy importante observar el estado de las instalaciones comunitarias para evitar futuros contratiempos. En este proyecto, por ejemplo, se modificó la instalación de saneamiento en su totalidad, incluso el tramo de la bajante.

Queríamos dotar a la vivienda de aire acondicionado, y para ello debíamos salvar una dificultad: la estructura que cruzaba el salón nos impedía llegar a la segunda habitación. Recurrimos a unos falsos pilares y jacenas en el salón y habitación principal para colocar la instalación. Esta solución es muy conveniente porque nos permitió unificar alturas y ordenar las estancias.

Acabados

La carpintería exterior es Pvc blanco de la marca Gealan y la interior es lisa lacada en blanco con herrajes y maneta en negro. El suelo es un laminado en roble (de la marca Quick Step) con rodapié de 9cm lacado en blanco.

La cocina está alicatada con porcelánico blanco de gran formato y soldada con gris cemento, para darle mayor amplitud. El mueble de cocina está hecho con puerta lisa gris lacada con tirador incorporado combinada con madera de roble en hornacina y mostrador. Con encimera crema de Silestone.

El baño principal está dotado de plato de ducha textura pizarra en blanco, inodoro empotrado suspendido y mueble lavabo de estructura metálica negra con baldas en roble sobre el que apoya un lavabo bowl en blanco. Se colocó en negro la grifería empotrada del lavabo, la grifería de la ducha y la mampara. La paleta de blancos, madera y negro funciona muy bien. Además incorporamos un mueble espejo empotrado aprovechando el hueco generado por las nuevas instalaciones instalaciones.